domingo, 27 de octubre de 2013

LA COMIDA DEL REY


En el primer capítulo del libro de Daniel encontramos el inspirador relato de un pequeño grupo de jóvenes hebreos que fueron seleccionados para estar en el palacio del rey de Babilonia junto a otros tantos, los cuales iban a pasar por un riguroso proceso de entrenamiento y formación en la lengua de los caldeos, a fin de que estuviesen en óptimas condiciones para servir al monarca en todo lo que fuese necesario.
Éstos jóvenes poseían cualidades excepcionales, ya que pertenecían a la realeza y habían sido instruidos en toda sabiduría y conocimiento, además de que tenían buena apariencia física (versos 3-4).
La condición de éstos jóvenes era tan privilegiada que se les asignó ración alimenticia proveniente de la provisión del rey (verso 5), pero rápidamente ellos advirtieron que tal comida representaba un peligro para su salud física y espiritual. Probablemente esta comida era altamente desbalanceada y contenía ingredientes que les estaba prohibido ingerir de acuerdo a la ley de su Dios, o quizás se trataba de una comida ritual que era dedicada a los dioses babilónicos antes de ser consumida. En todo caso se trataba de una comida inaceptable que debían evitar a toda costa para no comprometer su integridad.
Los jóvenes hebreos, con Daniel a la cabeza, se las arreglaron sabiamente para evitar consumir la comida del rey llegando a un acuerdo con la persona que estaba a cargo de ellos( versos 9-14). El resultado fue que ellos, a pesar de estar consumiendo tan sólo legumbres y agua (versos 12 y 16), fueron hallados más saludables que los demás y, eventualmente, pasaron a ser diez veces mejores que el resto en sabiduría e inteligencia( verso 20).
La comida del rey representa en la actualidad una metáfora de aquellas cosas que, en un determinado contexto social ( laboral, profesional, académico, familiar, etc.), nos resultan atractivas pero constituyen una fuente de contaminación que nos puede impedir llegar al sitial de excelencia y éxito que Dios desea para nosotros.
La comida del rey podría ser esos actos de corrupción que se practican en oficinas públicas y privadas para lograr alguna ventaja o ganancia deshonesta. O quizás sea las trampas que se realizan en las aulas para obtener mejores calificaciones. Puede que sea las violaciones a las leyes de tránsito para llegar mas temprano a mi destino, o prácticas que atentan contra las personas con quienes compartimos la vida comunitaria. La comida del rey podría ser actos de irrespeto a las cosas de Dios en la vida congregacional o ministerial. La comida del rey podría ser, en efecto, un alimento, que debemos evitar por ser perjudicial para nuestra cuerpo físico, o algún hábito dañino que nos sentimos tentados a adoptar. En todo caso la comida del rey nos contamina y nos impide alcanzar el nivel sobresaliente que Dios desea que logremos.

¿ Qué es la comida del rey en tu caso particular? Debes primeramente ser capaz de identificarla, y luego debes tomar la crucial decisiòn de consumirla o rechazarla. Si haces lo segundo, habrás tomado la decisiòn correcta, y, cual alguno de los jóvenes hebreos del capitulo 1 de Daniel, llegarás a ser DIEZ VECES MEJOR que aquellos que optan por consumir LA COMIDA DEL REY.

Y DANIEL PROPUSO EN SU CORAZÓN NO CONTAMINARSE CON LA PORCIÓN DE LA COMIDA DEL REY, NI CON EL VINO QUE ÉL BEBÍA...( DANIEL 1:8A)