domingo, 11 de agosto de 2013

LA TRAMPA DE "LO MENOS MALO"

Se pone en evidencia que alguien ha caído en la trampa de "lo menos malo" cuando, al ser confrontado con respecto a alguna mala acción, se defiende argumentando que otra u otras personas lo hacen peor. Por ejemplo, si un supervisor reprende a un empleado que llega tarde a su lugar de trabajo y este reacciona diciendo: !Pero fulano de tal llega siempre más tarde que yo y no le dicen nada! Es obvio que semejante persona encuentra justificación para su error en el hecho de que su referente incurre en el mismo error en mayor grado.
Otro ejemplo es cuando dos personas discuten temas políticos y una de ellas favorece al gobierno de turno, mientras la otra lo adversa. A menudo en este tipo de controversia quien está en contra saca a colación una serie de reproches sobre los desaciertos de las autoridades en la solución de los problemas nacionales, y la otra persona responde con un argumento similar a este : !Pero en tal o cual país las cosas están mucho peor; nosotros estamos bien en comparación con ellos!
El asunto reside en que las malas acciones no están atenuadas y mucho menos justificadas en el hecho de que las haya peores. Lo malo no deja de serlo al compararse con lo peor.
 Cuando caemos en la trampa de lo menos malo evitamos todo esfuerzo por cambiar y permitimos que las cosas se agraven hasta los niveles que tomamos como referencia para auto-justificarnos. ¿Acaso debemos esperar que las cosas empeoren para corregirlas? ¿ Acaso esperaremos a ser tan malos como los demás para decidir hacer algo al respecto?
Entendamos que lo incorrecto lo sigue siendo aunque existan otras incorrecciones de mayor intensidad, porque tanto se equivoca el que da cerca del blanco como el que da lejos de el. El que casi acierta falla, el que casi triunfa fracasa, el que casi se salva se pierde, y el que casi lo hace bien lo hace mal.

"En este mismo tiempo estaban allí algunos que le contaban acerca de los galileos cuya sangre Pilatos había mezclado con los sacrificios de ellos. Respondiendo Jesús les dijo: ¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas eran más pecadores que todos los galileos? Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente". (Lucas 13:1-3)

domingo, 4 de agosto de 2013

LA CULTURA DE "TODO EL MUNDO"

La cultura de "Todo el Mundo" es una forma de pensar, expresarse y actuar según la cual la comisión de una mala acción está justificada cuando la generalidad o al menos un gran número de personas practica la acción en cuestión. Quien ostenta esta cultura dice cosas como las siguientes: "Todo el mundo miente de vez en cuando...yo también. Todo el mundo viola las señales de tránsito...yo también. Todo el mundo llega tarde a la oficina...yo también. Todos mis amigos son infieles a sus cónyuges...yo también". Esta cultura se caracteriza por nadar con la corriente y dejarse llevar por lo malos e irresponsables ejemplos de las multitudes. Es una manera de volverse parte del montón y rehuir la posibilidad de ser especial y excelente. Una mala acción o costumbre sigue siendo incorrecta aún si un 99.9 por ciento de la humanidad la practica.Y siempre, tarde o temprano, desemboca en disolución y fracaso. Nunca hallaremos justificación para lo indebido en el hecho de que sea la costumbre de las mayorías.
Tu y yo hemos sido llamados por Dios a una vida de excelencia, la cual consiste en estar por encima de las multitudes en lo que a moral y espiritualidad concierne. Rechaza el ser alguien mediocre y negativamente ordinario y común, y abraza la integridad, la rectitud y la santidad. Evita caer en ese fatídico estilo de vida como lo es la cultura de "Todo el Mundo".

"NO SEGUIRÁS A LOS MUCHOS PARA HACER  MAL..."( ÉXODO  23:2a)

"ENTRAD POR LA PUERTA ESTRECHA; PORQUE ANCHA ES LA PUERTA, Y ESPACIOSO EL CAMINO QUE LLEVA A LA PERDICIÓN, Y MUCHOS SON LOS QUE ENTRAN POR ELLA..." (MATEO 7:13)